20110405

Trilogía de los Pedazos Encontrados

En estas tres entregas el Escuadron Anti-Fordeña (El-que-no-tiene-nombre) trabaja sobre material previamente captu-reproducido entre 1437 y 2458.

Desde las islas de Parmisania hasta la colonia marítima de Robinson, este pedazo
de documento tripartito se puede ver como un ejercicio en musico-truatologia.
Entre el material utilizado se pueden encontrar pedazos de discursos dados por Él en epocas de magonejismo, secciones de entrevistas al Capitan, momentos no utilizados por RAdio KAlcio y Horacius, porciones de locura nunca editada de Eskimo Bob, extractos de rituales de anatomia, cachos de musica capturada en fiestas mundiales como la del Molino o como el dia del Trampolin como tambien porciones musicales no editadas compuestas por El-que-no-tiene-nombre.

Posteriormente ensamblados no muy conscientemente estos pedazos forman un ejemplo claro del potencialismo. Porque podría ser cualquier cosa. Y de hecho lo es.
Trascendencia truata!


Parte 1: Magia Magonejo!























01. La Anatomia de los Brujos
contribuciones sampleadas de: eskimo bob, él, el capitan, orquesta costal de parmisania

02. Relato Zombie #45
contribuciones sampleadas de: mahahara, truata anonimo

Andando de noche por el bosque solo encontré una fogata, decidí acercarme hacia ella a ver si había alguien que pudiese ayudarme.
Hace tres días que no comía nada, hace cuatro días que no tomaba agua.
Los zombies habían arrasado la ciudad, los zombies se habían hecho con todo.
Habian matado y destrozado y se habian alimentado de la sociedad.
Los zombies.
Al acercarme a la fogata previamente mencionada me di cuenta de que en realidad no había nadie allí, solo unos bolsos recostados sobre unos troncos de madera y sin pista de nadie. Por un momento me preocupe por mi vida. Si había zombies allí que haría? No tenia mas que pedacitos de algodón en la mochila y mi carnet de la biblioteca.
Detrás del árbol se escondía un personaje particular. Me apunto con su pistola y me pregunto si era un zombie.
Yo le respondí y le dije: No. No soy un zombie.
Bajo su arma y me ofreció un pedazo de malvavisco. Yo agarre el malvavisco muy felizmente, como mencione hace tres días que no comía.
El señor me contó que estaba ahí hace tres meses cazando vampiros dentro del bosque y comiendo restos de las ratas encontradas en las alcantarillas cercanas al árbol tercero a la derecha.
Decidi pasar la noche allí, ya que una buena fogata y carne de rata nunca hacen mal a la buena salud de un truata.
A la mañana siguiente me dirigí al siguiente pueblo siguiendo el camino al norte. Siempre al norte.
Como me esperaba, me encontré con un pueblo arrasado. Sin visión de nadie en las cercanías decidí entrar al almacén de la esquina. Me hice con provisiones y decidí seguir mi camino siempre al norte.
Siempre al norte.

Proximamente las partes 2 y 3!

Te desprecio
Horacius

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RAdio KAlcio